¿Tienes dudas?
¿Tienes dudas?
Los tratamientos de ácido hialurónico se han convertido en uno de los principales de todas las consultas de medicina estética. ¿La causa? Esta sustancia ofrece un gran abanico de mejoras en la calidad de la piel, la hidratación, la creación de colágeno y las estructuras faciales son algunas de sus muchas virtudes.
El ácido hialurónico es un polisacárido que nuestro propio cuerpo fabrica de manera natural, presente en tejidos como la epidermis, los cartílagos, el tejido conectivo o los ojos. Su principal característica es su capacidad de atraer y retener el agua.
“Nuestro cuerpo reconoce al ácido hialurónico inyectable como algo natural, por lo que sus efectos adversos debido al rechazo de nuestro cuerpo son casi nulos”.
El uso de ácido hialurónico en la cara es seguro. Es la única sustancia que, de ocurrir una complicación durante su aplicación, se puede retirar rápidamente, aplicando la enzima hialuronidasa.
La naturalidad y la seguridad que ofrece este producto, en combinación con sus buenos resultados, lo han convertido en una de las soluciones más solicitadas de nuestra clínica.
El ácido hialurónico inyectable puede estar en un formato más líquido o más reticulado, en función de cuál sea el uso que se le quiera dar. En cualquiera de los casos, la buena aplicación implica un resultado natural y armonioso en todo el rostro. ¿Para qué sirve exactamente el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico tiene efectos muy positivos en pieles de todas las edades. Cada vez son más los pacientes jóvenes que acuden a las consultas de estética para modificar debilidades estructurales o dar volumen a ciertas zonas de su rostro mediante el tratamiento de ácido hialurónico.
Con el envejecimiento, perdemos volumen debido a la pérdida de colágeno y el desgaste óseo. En personas que tienen una estructura facial correcta, el ácido hialurónico no busca dar volumen extra, sino reposicionar aquellas zonas que han perdido volumen con la edad, para dar un efecto lifting natural.
“Independientemente de la edad y los resultados que se quieran obtener, lo más importante al someterse a este tratamiento es encontrar la clínica y el doctor adecuado”.
En nuestra clínica aplicamos el método Jordán Barres para que todos nuestros pacientes obtengan de este tratamiento exactamente lo que desean: un rostro más joven, saludable y simétrico.
El primer paso es escuchar qué expectativas tiene el paciente para entender qué quiere. A continuación, realizamos un diagnóstico, teniendo en cuenta los deseos del paciente, pero también la complejidad de su rostro y su estructura ósea natural.
De esta manera, podemos ofrecer un tratamiento bien asesorado y lograr el objetivo final: realzar la belleza natural.
El ácido hialurónico se reabsorbe poco a poco, haciendo que desaparezca lentamente de la piel. Por eso, aproximadamente una vez al año es necesario regresar a la clínica para hacer pequeños retoques.
Pero esto no significa que se pierdan sus efectos por completo: un paciente de ácido hialurónico inyectable puede tener la piel en mejor estado un año después de su aplicación, que el día antes de seguir el tratamiento.
La diferencia principal es el tipo de sustancia: el bótox es una toxina botulínica y el ácido hialurónico es un polisacárido natural.
Es decir, el bótox resulta útil para las arrugas dinámicas: aquellas que se forman por la contracción muscular (frente, entrecejo y patas de gallo). Esta toxina relaja la musculatura, haciendo que pierda fuerza y que esas arrugas vayan desapareciendo. Lo que actúa no es el producto, sino el efecto de la toxina en el músculo.
Mientras que el ácido hialurónico es más útil para las arrugas estáticas, que se marcan en reposo, como el surco nasogeniano, así como para las arrugas provocadas por la flacidez.
¿Quieres recibir contenido exclusivo y de tu interés?
Nos encantará que hablemos y poder contarte todas nuestras novedades de primera mano.
Genial, valoraremos tu caso por teléfono
Proporcionanos tu número de teléfono y un miembro del equipo te llamará para valorar tu caso
Damos respuesta a tus dudas
Déjanos tus datos y cuéntanos tus dudas sobre este tratamiento y un miembro del equipo se pondrá en contacto contigo para aclarar tus dudas
III. ACEPTACIÓN Y CAMBIOS EN ESTA POLÍTICA DE PRIVACIDAD
Es necesario que el Usuario haya leído y esté conforme con las condiciones sobre la protección de datos de carácter personal contenidas en esta Política de Privacidad y de Cookies, así como que acepte el tratamiento de sus datos personales para que el Responsable del tratamiento pueda proceder al mismo en la forma, durante los plazos y para las finalidades indicadas. El uso del Sitio Web implicará la aceptación de la Política de Privacidad y de Cookies del mismo.
DR JORDAN BARRES se reserva el derecho a modificar su Política de Privacidad y de Cookies, de acuerdo a su propio criterio, o motivado por un cambio legislativo, jurisprudencial o doctrinal de la Agencia Española de Protección de Datos. Los cambios o actualizaciones de esta Política de Privacidad y de Cookies serán notificados de forma explícita al Usuario.
Esta Política de Privacidad y de Cookies fue actualizada el día 27 de mayo 2018 para adaptarse al Reglamento (UE) 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de abril de 2016, relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos (RGPD).
Las cookies necesarias activan las funciones básicas como la navegación en la página y el acceso a áreas seguras de la página web. La página web no puede funcionar adecuadamente sin estas cookies.
Ejemplo:
Permiten realizar la solicitud de inscripción o participación en un evento
Utilizar elementos de seguridad durante la navegación
Las cookies de preferencias permiten a la página web recordar información que cambia la forma en que la página se comporta o el aspecto que tiene.
Ejemplo:
Su idioma preferido o la región en la que te encuentras.
Las cookies estadísticas ayudan a los propietarios de páginas web a comprender cómo interactúan los visitantes con las páginas web reuniendo y proporcionando información de forma anónima. Todo ello a fin de mejorar la experiencia de navegación.
Ejemplo:
Permiten medir, de forma anónima, el número de visitas o la actividad.
Permiten que la publicidad que te mostramos sea personalizada y relevante para ti. Gracias a estas cookies no verás anuncios que no te interesen.
Ejemplo:
Permiten ofrecer publicidad acorde con tus intereses.